Canalejas de Puerto Real – Pobres pastores (Campanilleros)
En el monte las noches oscuras
toítos los pastores a la madrugá
forman corro y encienden candela,
pa ahuyentar las fieras
que acechando están.
El Peluso – A tu cara la acerqué (Fandangos)
Una rosa que cuidaba
a tu cara la acerqué;
la rosa se marchitaba,
y no pudo florecer
de la envidia que le dabas.
Manuel Escacena – Me gusta por la mañana (Guajira)
A mí me gusta por la mañana,
después del café bebido,
pasear por Las Habanas
con mi tabaco encendido.
Pepe Marchena – Romance a Córdoba (Romance)
Sé que no me pertenece,
que no es de mi condición,
pero ya no hay solución;
el hombre siempre obedece
cuando manda el corazón.
Pepe Marchena – La rosa (Milonga)
Era un jardín sonriente,
era una tranquila fuente de cristal.
Era a su borde asomada
una rosa inmaculada de un rosal.
Era un probe jardinero
que cuidaba con esmero del vergel;
y era la rosa un tesoro
de más quilates que el oro para él.
Manuel Vallejo – Catalina (Tangos)
Quítate de mi presencia,
que me estás martirizando;
y a la memoria me traes
cosas que ya estoy olvidando.
Niño de Medina – Visten de colorao (Soleares)
Visten de colorao,
y yo me visto de negro;
en pensar que me has dejao,
las estrellitas del cielo
se visten de colorao.
Niño Gloria – Se estaba criando pa mí (Alegrías)
Desde chiquita en la cuna
te están criando para mí;
y yo para que sea tu amante
desde la hora en que nací.
Angelillo – A mí qué me importa (Mirabrás)
Tiran bombitas
de la cabaña,
si será el rey
de la Gran Bretaña.
Pepe Marchena – Que no te guardo rencor (Fandangos)
Mira si yo te he querío
que no te guardo rencor;
después de lo que he sufrío,
y que todo entre los dos
para siempre ha concluío.
Cojo de Huelva – A pedirme se acercó (Fandangos)
Con el rostro mu tapao,
a pedirme se acercó;
no paraba de mirarme;
yo no sé qué recordó
que loca empezó a besarme.
Antonio Grau – Me lo dio un molinero (Taranta)
Tengo un libro de fortuna
que me lo dio un molinero;
al reflejo de la luna
yo leí en el renglón primero
más guapa que tú ninguna.
Corruco de Algeciras – Tener tranquilo el sentido (Fandangos)
Ni durmiendo puedo yo
tener tranquilo el sentío;
qué me habrá hecho esta mujer,
que ni durmiendo la olvío;
estoy loco por su querer.
Antonio el de la Carzá – Limón limonero (Bulerías)
Y a la sombra de aquel limonero,
que un día dichoso la vio sonreir,
deshojando una a una sus penas
igual que a una rosa le cantaba así.
Pericón de Cádiz – Lola Caireles (Fiesta por bulerías)
Se oyen las campanas allí repicar
en el barrio viejo de Santa María,
porque en esa iglesia se va a bautizar
la niña de Lola, que es mora toavía.
Manuel Vallejo – Llegó el frutero (Pregón)
También llevo la rica banana,
y las peras del mismo Aragón,
asomarse niñas a la ventana,
que las doy a probar con una condición,
que me compre siquiera un kilito,
si no gusta no quiero dinero,
ya se va, ya se va el frutero.
Manuel Torre – Amapolas de un trigal (Fandangos)
Corriendo desde el faro,
antes de llegar a tu puerta,
mi caballo se paró;
parece que comprendía
que me hacías traición
y volverme patrás quería.
Juanito Mojama – Manda un hombre en el cielo (Taranta)
En el cielo manda un hombre,
y en la tierra mandaba Dios;
y en Egipto mandaba un gitano
que le llamaban faraón.
Manuel Vallejo – El huerfanito (Bulerías)
Yo no tengo ni pare ni mare que sufra mis penas;
huérfano soy.
Sólo llevo tristeza y martirio dentro de mi alma;
y el cruel el dolor
de no hallar una mujer, una mujer buena
que me llene el vacío tan grande
que ellos me dejaron;
con cruel dolor.
Yo no tengo pare, yo no tengo mare,
yo no tengo a nadie que me quiera a mí.
Angelillo – Pa eso no sirve el dinero (Fandangos)
Si dinero no te doy
no te debes enfadar,
pues el querer verdadero
no se debe de comprar;
pa eso no sirve el dinero.