Niño de la Huerta – Contigo la comparé (Fandangos)
En el campo me encontré una rosa
y yo contigo la comparé;
mira si serás hermosa
que te comparo yo, mujer,
con la más bonita rosa.
Pericón de Cádiz – A una liebre malhería (Fandangos)
Yo he visto en un matorral
a una liebre malhería;
y al quererla rematar,
me faltó la valentía
y la tuve que dejar.
El Peluso – Que el agua te negaré (Fandangos)
No vengas en busca mía,
que el agua te negaré;
que es tan grande tu maldad,
que no hay en el mundo mujer
que se te pueda igualar.
Juanito Mojama – Manda un hombre en el cielo (Taranta)
En el cielo manda un hombre,
y en la tierra mandaba Dios;
y en Egipto mandaba un gitano
que le llamaban faraón.
Antonio el de la Carzá – Limón limonero (Bulerías)
Y a la sombra de aquel limonero,
que un día dichoso la vio sonreir,
deshojando una a una sus penas
igual que a una rosa le cantaba así.
El Carbonerillo – Mucha pena me da (Fandangos)
Y mucha pena me da;
si es que va por el camino,
a mí mucha pena me da.
Y lo que me da más pena
es lo contenta que vas
siendo como eres tú tan buena.
Cojo Luque – Debe cortarse de un tajo (Fandangos)
La rama que estorba al tronco
se tira a tierra de un tajo;
tú a mí no me convenías
y yo te arranqué de cuajo,
porque vi que me perdías.
Antonio el Sevillano – Mi caballo (Bulerías)
Los contrabandistas de me llaman el rey
por mi valentía burlando la ley,
yo quiero que mi suerte la lleve el destino,
yo sé que ná malo me pué a mí pasar,
mientras mi serrana por mí vele y rece
y Dios que es tan bueno la quiera escuchar.
Manuel Torre – Amapolas de un trigal (Fandangos)
Corriendo desde el faro,
antes de llegar a tu puerta,
mi caballo se paró;
parece que comprendía
que me hacías traición
y volverme patrás quería.
Pepe Pinto, Juanito Valderrama y Fosforito – Martinete del Café del Burrero (Martinetes)
Soy eray en el vestir,
calorró en mi nacimiento;
yo no quiero ser eray,
con ser caló estoy contento.
Bernardo el de los Lobitos – Un triste rancho (Milonga)
Si llegara a suceder
que esta ingrata me olvidara,
su culpa la perdonara,
y la volviera a querer;
pero lo que no ha de ser,
que la vuelva a querer yo;
Manuel Centeno – Parroquia de San Lorenzo (Saeta)
Parroquia de San Lorenzo,
orgullo debes de tener,
porque encierras en tu capilla
al Señor del Gran Poder,
que es lo mejor de Sevilla.
Gracia de Triana – La gente se me reía (Fandangos)
Cuando contigo pasaba
la gente se me reía,
y yo como te quería
ni siquiera sospechaba
del ridículo que hacía.
Manolo Manzanilla – Yo te imploro, Virgen mía (Fandangos)
Yo te imploro, Virgen mía,
que le hagas comprender
a esa mujer maldecía
que la he llegao a querer
como no se merecía.
Niño de la Rosa Fina – No encontré a la que quería (Fandangos)
Entré en un jardín por flores,
y no encontré la que yo quería;
la que a mí me gustaba
la quitaron aquel día
y en la rama ya no estaba.
Manuel Vallejo – Al Cristo de la Humildad (Tangos)
Se lo he pedío llorando
al Cristo de la Humildad;
que este querer que te tengo
me lo acabe de quitar.
Niño de Vélez – Que tú nunca me has querido (Verdiales)
Le andas diciendo a la gente
que tú nunca me has querío;
más vale que te acordaras
cuando a buscarme has venío
llorando pa que te hablara.
Corruco de Algeciras – Tan sólo por olvidar (Fandangos)
Yo paso el día bebiendo,
tan sólo por olvidar
la cara de esa mujer
que tanto me hizo penar,
por culpa de tu querer.
Corruco de Algeciras – Tener tranquilo el sentido (Fandangos)
Ni durmiendo puedo yo
tener tranquilo el sentío;
qué me habrá hecho esta mujer,
que ni durmiendo la olvío;
estoy loco por su querer.
Juan Varea – Vi una fragante rosa (Taranta)
Vi una fragante rosa,
contigo la comparé,
porque era maravillosa,
pero tenía también
sus espinas dolorosas.